Desesperada, acude a Pino una de nuestras madres de más confianza, que la escucha con paciencia y la entiende. Vemos quienes son los que están por la zona... no es por acusar a nadie. Pero en fin, todo hay que decirlo. Cerca del delito se encuentran La Medina y La Jefa Chica... ahí lo dejo.
Protesta y protesta, La Medina sigue haciéndose el loco. Pino sigue paciente, La Jefa se ensalza y amenaza con poner normas nuevas para todos si seguimos robándole limonada. Y eso que aún no han llegado los calores, cuando lleguen los días de verano a esta pobre mujer no le dejan ni el agua.
Pino se resigna y la entiende... La jefa lo deja claro con pelos y señales, esto de robarle limonada se acaba aquí y y ahora. No va a permitir que nadie más la deje sin parte de su merienda. Por cierto, fíjense bien lo que pasa detrás de La Jefa... La Medina le está quitando algo más??? Yo no quiero saber en que acabará todo esto. La Bailarina Cotilla se despide más asustada que asombrada, saludos!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario